En Abril de 2021, nos acercamos a conocer la bonita Cascada del Hornillo, una ruta fácil y poco transitada, ubicada en la zona de la Sierra Oeste, muy cerquita de la población de Santa María de la Alameda, ya muy cerca de Ávila. La mañana la redondeamos visitando el Cañón del río Aceña, un cómodo paseo de 10 minutos, ubicado a pocos kilómetros de la estación de tren de Santa María de la Alameda-Peguerinos.
El día lo comenzamos desde la localidad de Collado Villalba. La distancia al parking de la Cascada del Hornillo es de unos 35 minutos, pasando por El Escorial y el Puerto de la Cruz Verde.
Índice
Mirador de Angel Nieto (Monasterio de San Lorenzo de El Escorial)
Pasadas dos curvas desde el Puerto de la Cruz Verde, dirección Robledondo y Santa María de la Alameda, se encuentra este bonito mirador, llamado Mirador de Angel Nieto:
Hay espacio para dejar las motos o un par de coches, es una parada rápida pero que ofrece unas vistas muy bonitas del entorno, y sobre todo del Monasterio de El Escorial. Lo siento por la imagen tomada desde mi móvil, dónde no se aprecia nada bien, pero se ve perfecamente la grandiosidad del monasterio. Mejor en directo, :). Te recomiendo parar:
Ruta a la Cascada del Hornillo
2 KM | 45′ | Baja | – | Todas | No | Sí | No |
Antes de llegar al pueblo serrano de Santa María de la Alameda, se encuentra el parking para acceder a la ruta a la Cascada del Hornillo, el cual tiene cabida para unos 20-25 coches. El parking se encuentra al lado del puente sobre el río Aceña.
Nosotros llegamos un sábado a las 09:45 de la mañana, sabiendo que hay poco sitio y ya había 15 coches. Una vez que se llena, sólo sería posible aparcar en alguna parte del arcén, donde no moleste. Un poco más adelante, dirección Santa María de la Alameda hay un arcén donde caben 2 o 3 coches, y después no parece haber sitio para dejarlo, pues es una carretera con curvas y quitamiedos.
El punto donde está sacada la foto es del final del parking, osea que tendrás que madrugar un poco y no llegar más tarde de las 10:00 si es fin de semana o festivo:
Al lado del parking comienza la Senda del Hornillo, una senda de 5 km, dificultad media y un tiempo estimado de recorrido de 2h 15′, si haces la senda completa (pero también puedes hacer como nosotros ir hasta la cascada y volver por un sendero bien bonito y llegar en unos 20′ ya que la cascada está aproximadamente a 1 km del parking):
Al lado del parking se encuentra un área con unas mesas que puede ser un buen punto para tomar algo antes o después de la ruta:
Nosotros no teníamos intención de hacer la ruta completa, tan sólo acceder hasta la Cascada del Hornillo. Desde el parking se tarda unos 20 minutos, dependiendo de tu ritmo, alcanzar la cascada. Ese fue el tiempo que tardé, acompañado por una niña de 3 años, por lo que se puede acceder a la cascada con niños pequeños.
No es apta para carritos de bebé, ya que el sendero es cuesta arriba y con bastantes piedras, pero acceder a la cascada se puede hacer perfectamente con mochila portabebé:
El paseo se hace a la sombra, propiciada por un ecosistema bastante tupido, principalmente pinos y robles, así que en verano es una ruta que debe ser agradecida, aunque la cascada irá con poca agua. Imagino que en otoño debe estar también muy bonito:
Aunque era Abril, el día que fuimos era bastante frío, unos 5 o 6º a esa hora de la mañana:
La ruta transcurre sin separarse apenas del Arroyo del Hornillo, que ya desde el comienzo de la ruta, empieza a mostrar algunos bonitos saltos de agua:
En esta primera parte de la senda, el camino es ancho, sin demasiadas piedras, y aunque es un poco cuesta arriba, se hace muy fácil:
Pasada esta primera zona, la cosa se pone un poquito más incómoda, pero tampoco demasiado, en la zona donde hay una barandilla de madera a tu izquierda, que funciona a modo de quitamiedos. El suelo es mucho más pedregoso y pica un poquito más para arriba, el camino para llegar a la cascada es ya prácticamente como el de la foto de abajo, aunque son poco más de 5 minutos:
Por esta zona, se disfruta de gran variedad ecológica, es un paseo muy agradable y una ruta bastante poco concurrida debido a la escasez de parking:
Cascada del Hornillo
Ya hemos alcanzado nuestro objetivo, la Cascada o Chorrera del Hornillo, salto de agua a modo de rampa sobre roca de gneis y 10 m. de altura que tras varios días de abril bastante lluviosos se encontraba con un buen caudal, fue una agradable sorpresa. El dia que visitamos la Cascada del Covacho, por ejemplo, a pesar de haber llovido los días previos, venía con poca agua:
Aquí Marina, mi pequeña exploradora, junto a su inseparable muñeca:
Hay un pequeño mirador, también con una vallita, para poder ver la cascada desde más cerca:
La ruta continúa bordeando la cascada, para acceder a su parte superior:
También quedan muy bonitas las fotos de la lengua de agua, desde su parte lateral:
Puedes ver la cascada desde arriba, si subes por las piedras, aunque yo no me asomé demasiado:
Nada más subir a la cascada, también hay algún que otro salto de agua por esta zona:
El camino a partir de este punto parecía que se ponía todavía más difícil, por aquí seguiría la ruta, aunque nosotros ya habíamos alcanzado nuestra meta. Desde aquí iniciamos la vuelta al parking:
A la vuelta nos despedimos de la cascada, buscando entre las rocas alguna perspectiva diferente y entreniéndonos un poco por la zona:
Tras otros 20 minutos, llegamos al parking. Eran las 11:00, y venía justo un coche, no saben la suerte que tuvieron de que justo me fuera, :D. Al abandonar el parking e ir hacia el pueblo de Santa María de la Alameda, había nada más cruzar el puente 3 coches en el arcén y otro que lo dejó como a la entrada de una finca, en una cuesta abajo bastante pronunciada, espero que pudiera salir de allí.
Santa María de la Alameda
Nuestro siguiente objetivo era visitar el Cañón del río Aceña, pero viendo que nos quedaba tan cerca este pueblo de la Sierra Oeste, nos acercamos en un momento. El coche lo dejé al lado de la iglesia, pero diría que podrías incluso dejarlo un momento en la propia plaza de la iglesia, donde se encuentran todos los puntos de interés.
Plaza de la Constitución
Es el eje neurálgico del pueblo. Aquí se levantan, dominando el espacio, el Ayuntamiento y la Iglesia, así como algunas viviendas típicas:
Iglesia de Nuestra Señora de la Alameda
Aunque el núcleo de población del pueblo era más pequeño que otros que conformaban el término municipal, la iglesia se levanta aquí en el S. XVI. La cabecera es la parte de la iglesia más antigua (comienzos S. XVI); al exterior presenta muros de mampostería y gruesos contrafuertes de granito.
El cuerpo del templo compuesto de tres naves separadas por columnas toscanas de granito está construido en ladrillo. El acceso se realiza por la nave, a través de un pórtico sustentado por dos columnas y cubierta de techa:
A los pies, la espadaña, levantada en piedra, es de estilo renacentista y está rematada con olas al estilo escurialense:
Ayuntamiento
Edificio de 1896, construido en mampostería con sillares en las esquinas y en los recercados de las ventanas lo que le confiere un aspecto muy macizo.
La fachada principal se abre a un espacio con dos columnas de granito. El piso superior presenta un balcón con rejería de hierro. Al igual que la plaza, fue renovado a finales del siglo pasado (1989):
Calle Regiones
Fotogénica calle que sube de la Plaza de la Constitución, donde se pueden apreciar bonitas viviendas a ambos lados, algunas de ellas con balconadas:
Talanqueras
A lo largo de la plaza, se conservan varias talanqueras, usadas para impedir el paso del animal cuando la plaza se convertía en plaza de toros:
Para dar fe de este hecho, al ir al coche nos encontramos con una vacas sueltas por el pueblo:
Tras una breve visita, nos encaminamos al Cañón del río Aceña, para llegar desde Santa María de la Alameda, llegamos al barrio de la estación, separado unos kilómetros del pueblo, y vimos de pasada con el coche, la Iglesia de Santiago Apóstol:
Cañón del Río Aceña
800 M. | 20′ | Muy Baja | – | Todas | No | Sí | No |
Para completar la mañana, nos acercamos al Cañón del Río Aceña. Para acceder a él, hay que ir al Area Recreativa del Río Aceña. Para llegar a ella tienes que tomar la M538 desde el barrio de la estación, y justo antes de cruzar el río Aceña, hay un pequeño desvío de tierra a mano izquierda (en Google Maps, aparece como calle Infantería).
Tras coger el desvío vas por un camino no asfaltado durante unos pocos metros, con una pendiente cuesta abajo y cruzas un pequeño puente sobre el río y nada más cruzarlo hay un par de zonas para aparcar. Creo que no es un lugar muy visitado y no tendrás problemas para dejar el coche. No se como será este acceso si llueve y se forman charcos, así que cuidado si hay lluvia o ha llovido mucho y eso es un barrizal:
Desde los primeros momentos, el entorno arroja una estampa bucólica donde dan ganas de hacer un picnic a la orilla del río:
Nada más dejar el coche, en ese par de explanadas que se intuyen a la derecha en esta foto de abajo, en seguida se encuentra el puente de la Parra, el cual hay que cruzar y seguir todo el recorrido por la parte izquierda del río:
Me pareció un lugar de gran belleza y además contamos con la ventaja que estabamos sólos:
El camino, como decía, transcurre a la izquierda del río y en todo momento cuenta con barandilla a la derecha, de nuevo a modo de quitamiedos. Cuidado con los niños que se pueden colar entre los maderos:
El paisaje que se aprecia es ocasionado por la erosión glaciar:
Las piedras que se encuentran próximas al río fueron arrastradas por una lengua de hielo que avanzaba lentamente, creándose una forma lobulada característica (glaciar de pie de monte) y la acumulación de esos bloques de gneis y granito, que reciben el nombre de morrena:
Por tanto, estamos apreciando la belleza de un lugar, que se ha ido formando, durante millones de años:
Puedes bajar al cauce del río y observar un poco más de cerca las formaciones rocosas:
A partir de este punto, a unos 800 m. del parking, siendo por tanto un paseo muy sencillo de unos 10 minutos, se acaba la valla y por tanto el «terreno transitable».
Nosotros, satisfechos, lo dejamos aquí y volvimos al coche, pero te puedes aventurar entre las rocas y senderillos y en teoría, puedes llegar campo a través hasta el puente del río Aceña, lugar donde dejamos el coche esta mañana para hacer la Senda del Hornillo:
Emprendimos la vuelta a Collado Villalba, con la bonita estampa del Monasterio de El Escorial, como telón de fondo:
Esperamos que os haya gustado esta entrada, con un par de sitios muy chulos de la Sierra Oeste, seguramente no muy conocidos, con el que pasar una buena mañana de fin de semana.