Una tarde primaveral de Mayo de 2021 armamos una ruta bastante apañada para recorrer en una tarde completa (15:30 salimos de la zona norte de Madrid y estabamos de vuelta en casa a las 20:00, atasco en la A-1 incluido) toda la zona del Valle Bajo del Lozoya, en la comarca de Sierra Norte, visitando el Embalse de El Villar, Cervera de Buitrago (Senda de los Tinaos del Pizarro al Embalse de El Atazar), Robledillo de la Jara, Berzosa del Lozoya y Serrada de la Fuente (actualmente absorbido en el municipio de Puentes Viejas).
Índice
Embalse de El Villar
Cuando planeamos la ruta, ni nos dimos cuenta que ibamos a pasar por aquí, pero la carretera (M-127) se estrecha tanto que pasas justo por el medio del embalse y quedas embobado con las vistas, así que a la vuela de la ruta paramos. Hay sitio para dejar el coche una vez pasada la presa, a mano izquierda, viniendo desde Madrid.
Fue construido en el S. XIX en el río Lozoya, y hoy en día sigue abasteciendo de agua a la población de Madrid. Toma su nombre de un poblado que existía por la zona, hoy extinto.
Destaca el muro de la presa, de planta curva (lo que supuso una gran innovación en su época), y el aliviadero, en uno de los extremos. Cuando el embalse alcanza su capacidad máxima el agua desborda por este lugar y cae en una cascada de 50 m. de altura:
También destacan las vistas de la lámina de agua y la vegetación adyacente:
así como de la garganta excavada por el río Lozoya, aguas debajo de la presa, dando lugar a una fantástica panorámica. De aquí parte una senda, llamada Senda del Genaro:
Cervera de Buitrago
En pocos kms. se llega a Cervera de Buitrago, el Puerto de la Sierra Norte, ya que se encuentra bordeado por el Embalse de El Atazar, y en él se pueden practicar deportes náuticos de interior (piragua, kayak, remo, paddlesurf, windsurf, vela ligera y de crucero) con más de 10 km² de superficie de navegación. Además respetando el medio ambiente ya que la navegación a motor está prohibida.
Museo de los Sentidos
Aparcamos el coche fácil al lado de este museo, en la entrada del pueblo.
Está ubicado en un edificio de nueva construcción y cuenta con un circuito sensorial que lleva al visitante a experimentar un viaje por la naturaleza a través de los sentidos, recibiendo estímulos e información por medio de elementos interactivos:
Parque Infantil y Merendero
Al lado del Museo de los Sentidos, hay un parque infantil para los más pequeños, dotado además de zona de merendero, así que es muy buen sitio para reponer fuerzas antes o después de visitar el pueblo:
Iglesia de Santa María de los Remedios
Es de estilo barroco, alzada en el S. XVI (1538). Conserva la cabecera original, así como el alfarje mudéjar que cubre dicha cabecera. Originariamente contó con dos naves, que pasaron a una sola tras la reforma que se acomete en 1945.
La sacristía se encuentra junto al altar mayor, formando un cuerpo aparte; la espadaña de dos cuerpos, se sitúa en un lateral, con dos arcos de medio punto pareados, y otro sobre los anteriores:
La portada es sencilla, de medio punto, con dovelas de sillería en la fachada meridional. Al igual que muchos de los templos de la zona, fue saqueado durante la Guerra Civil, momento en el que pierde el retablo del presbiterio. La decoración interior es actual, con imágenes de la Virgen de Fátima, Sagrado Corazón y San Roque. La excepción es un crucifijo de bronce del S. XIX, que se encuentra en la sacristía.
Ayuntamiento
Enfrente de la iglesia, se encuentra la Casa Consistorial, un ayuntamiento de los de mayor tamaño de toda la Sierra Norte:
Potro de Herrar
Construcción empleada para herrar al ganado de labor. El origen de esta pieza, típica de los municipios con tradición ganadera, se remonta a la Edad Media. Su manejo era sencillo: entre los monolitos de piedra se introducía al animal v se ataba a las forjas de hierro; el reducido espacio, junto a la presencia de tablones de madera, reducía la movilidad del animal para facilitar así la labor del herraje:
Plaza de las Arcas
Es una plaza abierta, la más importante del pueblo, y donde llamó nuestra atención esta bonita casa de piedra:
Viviendas Rurales
Las viviendas tradicionales se mezclaban con las construcciones agropecuarias (pajares, tinados, corrales, etc):
Las plantas de los edificios eran compactas y cerradas sin patios, en ocasiones anexos a la planta principal. Las cubiertas de teja árabe y de paños de gran tamaño con cornisas pequeñas. En general las fachadas se caracterizaban por ser lisas con ventanas pequeñas, grandes puertas y por la ausencia de balcones. El material usado tradicionalmente era la piedra de la zona, concretamente granito y pizarra, con los que se entremezclaba la madera en puertas y ventanas:
Puerto Náutico
Como comentábamos aquí se puede practicar todo tipo de deportes náuticos en un entorno privilegiado y muy cerquita de Madrid capital:
Senda de los Tinaos del Pizarro (Embalse de El Atazar)
| 2 KM | 40′ | Muy Baja | – | Todas | No | Sí | Sí |
Partiendo de la plaza de las Arcas y siguiendo la calle del Nogal, se llega al cementerio:
Desde aquí se pueden contemplar una de las mejores vistas del pueblo con su contraste entre pueblo serrano y marinero:
A la izquierda del cementerio sale una pequeña senda que nos conducirá entre jaras hasta los “Tinaos del Pizarro”.
El camino es muy sencillo: ancho y llano, apto para todo el mundo, incluido carritos de bebé. Son unos 4 km ida y vuelta, tardando unos 20 minutos por trayecto, por un paraje de lo más bonito. Absolutamente recomendable:
Embalse de El Atazar
Los Tinaos del Pizarro han sido recientemente restaurados y todavía utilizados por un ganadero local. Desde ese punto se pueden contemplar unas espectaculares vistas del Embalse de El Atazar, el embalse más grande de toda la COmunidad de Madrid:
Me atrevería a decir que es el sitio más bonito que he visto en mucho tiempo. Quizás fuera porque hicimos la senda mi hija y yo sin cruzarnos con absolutamente nadie, o quizás porque justo salió el sol y le dio al agua unos toques turquesas preciosos, o quizás fue el olor de las jaras en flor o simplemente la tranquilidad que se respiraba. Fue un momento mágico, me dió mucha pena marcharme de allí:
Para llegar a Serrada de la Fuente desde Cervera de Buitrago, se pasan por dos pueblos muy pequeños: Robledillo de la Jara y Berzosa del Lozoya, que son atravesados por la M-127, distan unos 3 km unos de otros y se llega a cada uno de ellos en apenas 5 minutos. La carretera es buena, no es de alta montaña y con curvas como la que llega a Puebla de la Sierra. Hicimos la visita a ambos pueblos bastante rápida, nada más que dimos una pequeña vuelta por la parte más céntrica.
Robledillo de la Jara
Iglesia de San Pedro Apóstol
Fue reconstruida en 1893, aprovechando los muros de una construcción anterior pero usando abundante ladrillo en refuerzos, huecos y espadaña. Es de estilo neomudéjar popular, muy diferente a otras edificaciones religiosas de la zona. En su interior se conservan una pila bautismal y otra de agua bendita renacentistas:
Potro de Herrar
Como todo pueblo de la Sierra Norte que se precie, no podía faltar el famoso potro de herrar, aunque en este caso sólo se han conservado los monolitos:
Berzosa del Lozoya
Iglesia de Nuestra Señora de la Asunción y San Roque
Sus orígenes datan del S. XVII y ha sido restaurada recientemente, al igual que lo fue tras los daños sufridos en la Guerra Civil, como muchas de las iglesias de esta zona:
Presenta planta rectangular y muros de mampostería, y cuenta con una espadaña de ladrillo de dos cuerpos y rematada con una cruz de granito, precedida de un acceso porticado:
Al lado de la iglesia se encuentra una fuente monumental:
Y justo detrás de la iglesia, una bonita casa rural de piedra:
Serrada de la Fuente
Este pueblo pertenece en realidad al municipio de Puentes Viejas, el cual está formado por cuatro núcleos: Mangirón, Cinco Villas (ambos al suroeste del embalse de Puentes Viejas), Paredes de Buitrago y Serrada de la Fuente (ambos al noreste del embalse). La sede municipal está en Mangirón.
Sea como fuere, Serrada es uno de los pueblos más bonitos y desconocidos de toda la Sierra Norte, una auténtica sorpresa para el viajero, ya que al pasear por sus calles parece que el tiempo se ha detenido.
Plaza de la Constitución
Se trata de la plaza principal del pueblo. Aquí, aparte de la iglesia y del ayuntamiento, destaca la posada que ocupa el edificio que antiguamente era la escuela del pueblo. Hoy en día ofrece alojamiento y comida tradicional (parece ser que destaca su cocido):
Iglesia de San Andrés Apostol
Es relativamente moderna y presenta una serie de rasgos característicos que la hacen diferente al resto de las de la zona. Estéticamente parece que nos encontramos ante un edificio civil, más que una edificación religiosa, dado el aspecto de su fachada principal.
En el exterior tiene una plazuela cerrada por un pretil de bolas herrerianas. Sus muros están realizados en mampostería con esquinales de ladrillo. Forma una única nave cubierta con armadura de tirantes, presbiterio con bóveda de arista en la que se incorpora la sacristía:
La espadaña se sitúa a los pies del templo, realizada, en tres cuerpos de mampostería y ladrillo, mientras que su portada adintelada está junto a la epístola. En su interior destacan una pintura barroca de San Andrés y las imágenes de San Andrés y Santa Teresa:
Ayuntamiento
Al fusionarse este pueblo con otros municipios para crear Puentes Viejas, este bonito edificio de piedra ha dejado de usarse como Casa Consistorial:
Potro de Herrar
Está formado por seis monolitos de granito y piezas complementarias de madera y forja. De éstas últimas se conservan las originales.
El potro de herrar era un elemento imprescindible asociado a la actividad ganadera. Su función era la de facilitar el herraje del ganado, ya que debido a su estructura se favorece una mejor inmovilización del animal:
Viviendas Rurales
Si estás buscando un pueblo con encanto rural y tranquilo, aquí seguro que lo vas a encontrar, ya que es un pueblo minúsculo de apenas 30 habitantes (el pueblo con el menor número de habitantes de toda la Comunidad de Madrid). Creo que cada rincón y casa del pueblo merece ser fotografiado, esas puertas de madera harán las delicias de los amantes de la fotografía:
Museo y Parque de Juegos Tradicionales
En la otra parte del pueblo, al otro lado de la M-127, se encuentra este museo con un doble espacio.
En el interior, se exponen diferentes réplicas de juegos castellanos tradicionales así como sus referencias históricas. En el exterior hay varias zonas lúdicas donde se puede jugar a la Petanca, la Herradura o la Rana.
En el momento de nuestra visita no había nada en esta zona exterior, imaginamos que los elementos para jugar estarían recogidos dentro:
Lavadero
En origen la gente lavaba la ropa en el arroyo de la Pila, frotando sobre las rocas. Con el transcurso del tiempo, a fin de facilitarles la vida a los vecinos de Serrada, se construye en los años 60 del siglo pasado, un lavadero en la parte alta del pueblo, camino del cementerio.
El edificio está formado por una sola planta rectangular con 6 ventanas, en la que se construyó una pileta en la que pudiera realizarse el lavado y aclarado de la ropa. La importancia del lavadero, no sólo era debida a su función sino como elemento de cohesión social, al ser punto de encuentro y reunión:
En resumen, una maravillosa excursión que te puede ocupar medio día bien aprovechado o quizás un día entero si quieres disfrutar de alguno de estos lugares, algunos no muy conocidos, con algo más de calma.
