En Octubre de 2021, una mañana que no tenía mucho tiempo para hacer alguna ruta más larga, me animé con esta corta pero interesante ruta bordeando el Embalse de Los Peñascales, por el curso del Arroyo de Trofas, perteneciente a la localidad de Torrelodones:
Índice
Ruta al Embalse de los Peñascales y Arroyo de Trofas (Torrelodones)
| 3’5 KM | 1h 15′ | Baja | 58M | Todas | Sí | Sí | No |
Parking
La ruta que os proponemos hoy parte del pequeño parking que hay justo enfrente de la depuradora de agua. Es un parking muy pequeño, con capacidad para unos 10-12 coches, máximo. La ruta comienza a la derecha del parking, a muy pocos pasos. Se trata de una ruta circular, y ésta terminaría justo donde se encuentra el coche gris. Nosotros la hicimos en sentido antihorario, pero se podría hacer al revés.
Llegamos a las 10:30 y no tuvimos problemas para aparcar. De todas formas, en la zona, muy residencial, hay multitud de calles donde se podría dejar muy fácil el coche:
Esta Urbanización de los Peñascales es de las más grandes de Torrelodones, y en esta parte en concreto, hay numerosos chalets y mansiones diseminados por el monte. Se empezó a formar en el S. XIX, como lugar residencial y vacacional, y sobre los años 30 del siglo pasado, tuvo una importante actividad industrial, con la fundación de la Granja de los Peñascales (especializada en miel), por parte de Gabriel Enríquez de la Orden.
Ruta
Al ladito del parking, comienza esta senda botánica por el entorno del embalse y la ribera de su arroyo (arroyo de Trofas) el cual nace en Hoyo de Manzanares y desemboca en el río Manzanares, siendo uno de sus principales afluentes.
Casi al comienzo hay una «escalera» que ayuda a salvar el desnivel. Esta ruta no es apta para carritos de bebé (sí para mochilas portabebé) ya que hay contínuas escaleras de piedra, subidas, bajadas y zonas pedregosas:
Enseguida se llega a la parte de arriba de la presa, a la lámina de agua, pudiendo en este punto ir por dos caminos, uno más pegado al embalse (Ruta Baja) que lo rodea circularmente y otro más aéreo (Ruta Alta), que sigue el curso del arroyo de Trofas:
Yo tomé la Ruta Alta, donde ya se divisaban los chalecitos en lo alto del monte, y posteriormente tomé a la vuelta la Ruta Baja, para atravesar al otro lado:
Una de las cosas que más me llamó la atención de la ruta, es que hay un momento que se empieza a volver más salvaje. Parece mentira que en 10 minutos caminando, cambie tanto el paisaje, de un lugar tan urbanizado como Torrelodones a un bonito paraje natural:
Chorrera del Arroyo de Trofas
Hay que estar atento cuando se llega a la zona pedregosa de la foto de abajo (está tomada a la vuelta), por dos motivos:
- Porque al volver, si queremos bordear el embalse hay que ir por la parte de la Ruta Baja, es decir, bajar por esa cuesta y seguir un rato el sendero hasta dar con un puente de madera.
- Porque encajonada entre rocas, se oye el rugir de una pequeña, pero ruidosa chorrera que forma el arroyo a esta altura:
La chorrera en esta época llevaba poca agua, pero he visto alguna foto en primavera y tiene bastante más caudal:
En foto no impresiona nada la verdad, pero creedme que el entorno es muy bonito, y el agua baja muy fuerte. En este vídeo se aprecia un poco mejor:
Podría haber obtenido mejores fotos, ya que hay una pendiente (bastante pronunciada) que permite bajar a sus pies, pero al ir con mi niña de 4 años, no me pareció seguro bajar con ella, ni tampoco apropiado bajar yo y dejarla sola arriba.
Arroyo de Trofas
La senda sigue el curso aguas arriba del arroyo, con continuos y ligeros ascensos y descensos, cargada de densa vegetación, con un rico y variado paisaje:
En ese sentido, la ruta es bastante agradecida, ya que no se hace muy monótona, con el mismo tipo de vegetación todo el rato, sino que va cambiando casi a cada paso:
Si vas con niños, hay que prestar atención en algunos puntos, ya que el sendero no es muy ancho y al lado izquierdo hay zonas con pendientes pronunciadas y puede haber una buena caída:
La senda termina en la Avenida del Pardo, donde se unen el arroyo de Trofas y el arroyo de la Espuma. Es hora de dar la vuelta y buscar el cruce de sendas que comentaba anteriormente:
Aquí algunas fotillos de la vuelta:
Éste es alguno de los puntos donde hay que tener cuidado con la pendiente si vas con niños:
Como decía, hay que llegar al cruce de sendas pedregoso, y tomar el sendero que baja. Este camino te lleva por una parte que está algo castigada todavía por los efectos de Filomena.
Puente de Madera
Hay que localizar este puente que permite cruzar a la vertiente contraria y completar la ruta circular por el embalse:
Embalse de los Peñascales
Se trata de una zona con gran abundancia de vegetación de ribera en muy buen estado de conservación. Destacan los fresnos, los sauces, chopos y juncos entre otras especies:
Actúa como corredor natural y como refugio para muchas especies animales, sobre todo aves, de las cuales encontramos gran variedad. Está incluido en el Parque Regional de la Cuenca Alta del Manzanares:
Es posible que encuentres algún pescador por esta zona:
Hay un punto donde tener especial cuidado con los niños, ya casi al final hay una especie de pasarela con una cadena, y ojo, porque hay cierta altura y puede haber una buena caída:
Presa
La ruta está llegando a su fin, alcanzando los pies de la presa. Aunque se conoce como Embalse de Peñascales, tanto el embalse como la presa tienen otro nombre: el de Gabriel Enríquez de la Orden, en memoria de quien fundara Los Peñascales a comienzos del S. XX y del que hablamos más arriba.
El embalse tiene una capacidad de 120.000 m3 de agua y la presa tiene más de 15 m. de altura. La presa pasó a titularidad municipal en 2014. Ya no sirve para abastecer de agua a los vecinos dela zona, ya que le dan servicio otros depósitos de agua, pero sí ha quedado como un espacio ambiental privilegiado usado para pasear por muchos de sus vecinos:
En definitiva, una ruta muy corta, ideal si no dispones de mucho tiempo, con abudante vegetación (estoy seguro que te sorprenderá la zona alrededor de la chorrera) y agradable de pasear.
Hola F. Marquez: Por casualidad hoy he entrado en alguno de tus relatos y no solo me ha gustado los lugares por donde has transitado, sino por la franqueza a la hora de hacerlos y los datos que sabes aportar, incluso cuando de lo que se trata solo es de dar un paseo, haciendo amena su lectura. Por todo lo cual creo que mereces que te felicite y te anime a proseguir con esta afición de tanto aprecio a la naturaleza.
Salu2,
Raúl
¡Muchas gracias por tus bonitas palabras Raúl!. Me alegro que te hayan resultado útiles y amenos los relatos.Y sí, me he aficionado mucho a la naturaleza con esto de la pandemia. Un saludo!