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Descubriendo los Dolomitas con Dolomiti Supersummer
En el verano de Julio de 2025 tuvimos la suerte de descubrir una de las formas más cómodas y espectaculares de conocer los Dolomitas en familia: la tarjeta Dolomiti Supersummer. Nos pareció una auténtica joya para familias con niños, porque te permite subir en teleféricos, telesillas y funiculares sin necesidad de hacer largas caminatas.
Todos estos remontes están repartidos por distintas zonas de los Dolomitas (Cortina d’Ampezzo, Val Gardena (Gröden), Alpe di Siusi (Seiser Alm), Val di Fassa, Carezza, Arabba / Marmolada, …). En total hay más de 140 medios de transporte que puedes usar, así que las posibilidades son infinitas:
Con esta tarjeta, pudimos explorar las montañas como si estuviésemos saltando de un mirador a otro, sin cansancio y con paisajes que te dejan sin palabras.
Nos pareció muy práctico para moverse por la montaña sin esfuerzo. Además, se adapta bastante bien al ritmo familiar: puedes usarla varios días o incluso solo en días sueltos, según la opción que elijas. Y si viajas con niños pequeños, hay descuentos y facilidades que te lo ponen fácil (por ejemplo, los menores de 8 años no pagan si van con un adulto con tarjeta).
Al final fue una forma genial de disfrutar del paisaje sin tener que hacer rutas complicadas ni cargar con todo el equipo a cuestas. Subes, paseas, haces fotos, te tomas algo en un refugio y vuelves tranquilo. Ideal si lo que buscas es ver mucho, pero sin prisas ni agotamiento.
Nuestra experiencia de 2 días con Dolomiti Supersummer
Estuvimos dos días completos usando la tarjeta, y en cada uno de ellos visitamos dos zonas distintas:
Día 1: La Marmolada y Cinque Torri
Funivia de la Marmolada
Comenzamos el día subiendo a la Marmolada, la cumbre más alta de las Dolomitas. Desde Malga Ciapela cogimos el teleférico que sube en tres tramos hasta la cima:
Ya solo el trayecto es impresionante: las vistas van cambiando a medida que asciendes. En la estación intermedia de Serauta, a unos 2.950 m de altitud, amén de unas vistas impresionantes, se encuentra el Museo de la Gran Guerra, considerado el museo más alto de Europa:
Y cuando llegas al final en Punta Rocca (3.265 m), el paisaje es simplemente abrumador. Hay una terraza panorámica, una pequeña capilla y el acceso al glaciar, que pudimos recorrer con los niños. Les encantó ver la nieve en pleno verano, y el aire puro allí arriba es algo que no se olvida:
Lo mejor es que no tienes que caminar nada para llegar a la cima. Subes, disfrutas, paseas un poco por la zona y bajas sin esfuerzo. Ideal si vas con peques.
Telesilla 5 Torri
Por la tarde nos dirigimos a la zona de Cinque Torri, cerca de Cortina d’Ampezzo. Allí cogimos el telesilla 5 Torri, un remonte cómodo con sillas cubiertas que te lleva a uno de los paisajes más fotogénicos de los Dolomitas:
Las formaciones rocosas de las “Cinco Torres” parecen sacadas de una película de fantasía:
Dimos un paseo fácil por la zona (hay senderos muy accesibles), hicimos fotos preciosas y nos sentamos en un refugio a tomar algo con esas vistas de postal. Fue un día redondo:
Día 2: Ciampac y Seceda
Góndola desde Alba de Canazei hasta Ciampac
El segundo día empezamos desde Alba di Canazei, donde cogimos una góndola moderna que nos llevó hasta la zona de Ciampac:
Es un lugar mucho menos concurrido, rodeado de montañas espectaculares y con una tranquilidad increíble:
Desde la estación superior se puede caminar un poco por caminos muy fáciles, y hay un parque infantil con vistas y muy completo. Los niños corrieron, jugaron, y nosotros simplemente nos dejamos llevar por el paisaje:
Funicular Ortisei – Seceda
Después, nos fuimos a Ortisei, en Val Gardena, para subir a uno de los puntos más conocidos de todo el valle: Seceda. Aquí primero coges una góndola hasta Furnes, y luego un teleférico panorámico que te deja en una especie de cresta natural:
Desde ahí se abre una de las vistas más impresionantes de los Dolomitas. Es difícil explicar con palabras lo que se siente allí arriba. El cielo, los prados, las montañas al fondo… parecía un cuadro. Hicimos una caminata corta y fácil por los senderos marcados, muy seguros y aptos para familias:
El sitio es perfecto para hacer fotos, merendar y dejar que los niños exploren un poco la naturaleza:
Valoración final
Después de estos dos días solo podemos decir que la tarjeta Dolomiti Supersummer ha sido una de las mejores decisiones del viaje. Te ahorra tiempo, esfuerzo y te abre la puerta a rincones increíbles sin necesidad de hacer rutas largas o exigentes. Todo ha sido muy fácil, muy bien señalizado, y adaptado tanto para adultos como para niños.
Si estás pensando en visitar los Dolomitas en verano con familia, esta tarjeta es totalmente recomendable. No solo te permite llegar a lo más alto, sino que lo haces con comodidad, seguridad y sin dejarte las piernas por el camino 😉
