VENECIA- RELATO DE VIAJE: PARTE III/IV
DIA 3: MARTES 10 ABRIL 2018
Después de desayunar en el hotel, nos encaminamos hacia la parada de ferries de Fondamente Nove. En menos de 10 minutos callejeando y tras pasar por varios puentes llegamos hasta allí. En días anteriores usamos la mochila portabebé, pero a partir de aquí ya usamos el carro de paseo.
Desde Fte Nove, y concretamente desde el muelle «A» parten los barcos que permiten realizar una de las excursiones más recomendables desde Venecia: la visita a las islas de Burano y Murano.
Se puede estirar el paseo incluyendo también la isla de Torcello, con la Iglesia de Santa María Asunta, aunque nosotros teníamos previsto visitar más cosas por la tarde en Venecia y no la visitamos.
En Fte Nove compramos el ticket de vaporetto válido para 2 días (30€). Nos merecía la pena ya que cada trayecto en vaporetto vale 7’5€, y sólo con visitar Burano, Murano y vuelta a Venecia son 3 trayectos. Además al día siguiente teníamos que volver a Piazzale Roma, camino del aeropuerto.
Toamos el Ferry 12 desde Fte Nove «A» hasta Burano «C» (42′ de trayecto, ferries cada 20′, 3 paradas: Murano Faro, Mazzorbo, Burano «C»).
Nada más partir el ferry, la primera isla de la laguna que se divisa es la Isla de San Michele, llamada «La isla de los muertos», la cual está ocupada casi por completo por un enorme cementerio:
También hay algunas iglesias como laIglesia de San Michele, de estilo renacentista:
En unos 40 minutos se llega a la isla de Burano. Alguien la definió en el foro de Los Viajeros como un «catálogo de Titanlux«, y la verdad que no le faltaba razón:
Os recomendamos pasear por las calles Fondamenta di Cao Moleca, Fondamenta Cavanella y Fondamenta de la Pescheria, para disfrutar de las vistosas casas de colores:
En esta época del año, y al ser menos turística que la isla de Murano, se podía pasear con gran tranquilidad y admirar la belleza de este rinconcito de la laguna véneta.
No tiene grandes monumentos de interés (ni falta que le hace), pero merece la pena llegar hasta laIglesia de San Martino Vescovo:
La calle más importante de la isla, y donde están la mayor parte de comercios y restaurantes es la Via Baldassare Galuppi:
Una de las casas más famosas de la isla, por su peculiar fachada, es la Casa Bepi (Corte del Pistor, 275) (Entrar por Via Baldassare Galuppi entre Pizzeria La Perla y tienda de encajes y Bar/Cafe Palmisano):
Después de callejear un poco, y perdernos por sus canales sin apenas gente, volvimos a la parada de ferries para acercarnos a Murano:
Murano se encuentra más cerca de Venecia, pero preferimos visitar Burano antes para no encontrar demasiada gente. Volvimos a tomar el Ferry 12: Burano «C» – Murano Faro (35′ de trayecto, ferries cada 20′) .
En el camino, se divisa la isla de Mazzorbo, donde llama la atención el campanario de laIglesia de Santa Caterina:
Una vez en Murano, y tras pasar por una calle repleta de tiendas de cristal (famoso en el mundo entero), llegamos a la zona de los canales:
El primer edificio de interés es la Torre dell’Orologio, perteneciente a laIglesia de Santo Estefano. A sus pies se encuentra la escultura realizada en cristal “El cometa Di Vetro”:
Os recomendamos cruzar el Ponte Longo, y bordear el canal central, hasta llegar a la maravillosaIglesia de Santa Maria y San Donato. Es el rincón que más nos gustó de la isla, con el toque que le daba ese campanario inclinado:
En el interior se puede contemplar un hermoso mosaico bizantino. Aunque exteriormente, nos pareció impresionante la columnata exterior en dos pisos del ábside de la iglesia:
De camino a esta iglesia merece la pena echar la vista atrás para observar la bonita estampa de laIglesia de San Pietro Martire:
A la hora de comer, nos decantamos por La Perla Ai Bisatei (Campo San Bernardo, 7). Un sitio acertado, donde comimos sin grandes alardes a buen precio.
También puede resultar de interés visitar el Museo del Vetro (Fondamenta Marco Giustinian, 8), aunque nosotros preferimos entrar a algunas de las muchas tiendas de venta de cristal para comprar algún recuerdo:
Volvimos hasta la parada de Murano Faro, y regresamos a Venecia, tomando de nuevo, el Ferry 12: Murano Faro – F.te Nove «A» (10′ de trayecto, ferries cada 20′).
Para la tarde, teníamos claro que queríamos pasear por el Barrio Judío de Venecia, ubicado en Cannaregio. Lejos de la zona mucho más turística de Rialto y San Marcos, hay mucha gente que desconoce que elMuseo Ebraico de Venezia (MEV) (http://www.museoebraico.it/en/), organiza visitas guiadas a 3 de las 5 sinagogas que hay en el barrio.
El precio es de 12€/persona, dura unos 50′ y las visitas son a las 10:30, 11:30, 12:30, 13:30, 14:30, 15:30 y 16:30. Nosotros habíamos reservado online previamente para la de las 16:30:
Durante la visita aprendimos que el término gueto tiene su origen en Venecia, ya que en el barrio de Cannaregio se instalaron varias fundiciones durante los siglos XIV y XV. “Gettare” era la palabra utilizada para referirse a «fundir«, y tras la llegada de los judíos al barrio, el vocablo acabó derivando a ghetto, que significa «lugar asignado a los judíos».
Hay cinco sinagogas en el barrio (Tedesca, Canton, Española, Levantina e Italiana). Hay dos que son fijas en la visita (Tedesca y Canton) y otra que va variando entre la Española y la Levantina, dependiendo de la época del año. A nosotros nos tocó la Levantina.
La estrechez de espacio para construir (ya que los judíos tenían prohibido salir del ghetto) y para respetar la ley que prohibía que entre el cielo y los templos hubiera cualquier tipo de construcción humana, obligó a levantar algunas sinagogas en lo alto de los edificios. Es por eso que para visitar dos de ellas (Tedesca y Canton) no se abandone el propio edificio del MEV.
LaSinagoga Alemana (Scola Tedesca) fue construida por la Comunidad Ashkenazi alrededor de 1528, convirtiéndose en la más antigua de las sinagogas venecianas. El arquitecto tuvo que superar considerables dificultades para reducir el área asimétrica a una sala de proporciones más regulares. Es una pequeña joyita de forma ovalada:
LaSinagoga Francesa (Scola Canton) toma su nombre de la familia que lo construyó o de su ubicación en el «cantón» (en la esquina) del Campo del Ghetto Nuovo. En la primera foto que hemos puesto del MEV, si te fijas en una pequeña estructura de madera con una ventana, se corresponde justo a esta parte:
Fue iniciada en 1531, y al igual que la Scola Tedesca, también es de rito Ashkenazi:
Saliendo ya del MEV, en la misma plaza, se encuentra laSinagoga Italiana. Creada en 1575 por la comunidad de origen italiano (el más pobre del ghetto), es la más simple de todas las sinagogas del barrio. Además la fachada requiere de un poco de pintura:
La última sinagoga que visitamos fue laSinagoga Levantina, ubicada en el Ghetto Vecchio. Establecida en 1541, es la primera sinagoga sefardí en Venecia. Todavía sigue en uso y es utilizada durante los meses fríos. La restauración barroca de esta sinagoga fue probablemente atendida por la escuela de Baldassare Longhena:
La última sinagoga del barrio es laSinagoga Española, ubicada al lado de la Sinagoga Levantina, y como decimos que se turna con ésta para las visitas guiadas. Fundada en 1581 por la comunidad sefardí de origen español y portugués, expulsada de España en 1492, es la más grande de las sinagogas venecianas. Exteriormente destacan sus vidrieras y su puerta de madera:
Se trata de una visita muy recomendable, saliéndose de los tópicos por los que destaca Venecia. Como véis exteriormente no lucen nada, pero los interiores son bien bonitos y sorprendentes.
Volvimos al hotel, dando un paseo por el tranquilo barrio de Canareggio. Constatamos que aquí el paseo es más placentero que en otros barrios de la ciudad más abarrotados:
Otra iglesia muy interesante en este barrio es laIglesia de Santa Madonna del Orto. Su horario es de L-S: 10:00-17:00, D: 13:00-17:00 horas. El precio es de 3 €:
En ella se encuentran los cuadros de Tintoretto: «Presentación en el Templo», «La adoración del becerro de oro», «Juicio Final» y las «Cuatro virtudes cardinales»:
Seguimos paseando por el barrio, localizando el bonito Palazzo Mastelli, con su relieve del camello:
También son famosas las estatuas que hay alrededor de Campo dei Mori, llamada así porque aquí vivían los mercaderes árabes. Hay 3 estatuas, del siglo XIII, de los tres hermanos moros Rioba, Sandi y Afani, que venían del peloponeso (del Reino de Morea):
Otra de las casas interesantes del barrio es la Casa de Tintoretto. Jacopo Robusti, conocido como Tintoretto, nació aquí en 1518. La casa le fue entregada por su suegro, Marco Vescovi, y el pintor vivió allí hasta su muerte en 1594. El padre de Tintoretto, Battista Robusti, era un teñidor de telas y de ahí su profesión derivó el apodo con el que el artista se hizo famoso en todo el mundo:
Llegamos al hotel, y tras descansar un poco, salimos de nuevo a cenar. Teníamos una reserva con El Tenedor (echadle un ojo porque con lo caro que es comer en la ciudad, merece la pena encontrar ofertas) en el restauranteWine Bar Teamo (Rio Terrà de la Mandola, 3795). Nos gustó mucho el sitio, os lo recomendamos.
Como teníamos el ticket de vaporetto para dos días, tomamos uno de ellos, y contemplamos alguno de los maravillosos palacios que dan con sus fachadas al Gran Canal como el Palazzo Ca D’Oro:
O el Palazzo Ca’ Pesaro:
Tras salir de cenar, estaba lloviendo un poco, pero aún así tuvimos ganas de acercamos a ver la fachada del famosísimo teatro de laFenice:
Y como no, llegamos hasta la Piazza San Marco, esa preciosa plaza, que no te cansas de ver y fotografiar, ya sea de día o de noche: