DIA 6: JUEVES 18 ABRIL 2019: COLMAR – CASTILLO DE HAUT KOENIGSBOURG – OBERNAI – ESTRASBURGO
Durante este día visitaríamos uno de los castillos más imponentes del mundo, el Castillo de Haut Koenisbourg; así como un pueblecito con encanto llamado Obernai, que pilla de camino a Estrasburgo, una de las ciudades más bonitas de Francia.
Colmar – Castillo de Haut Koenisbourg (28 KM, 33′)
Castillo de Haut Koenisbourg (09:30 – 12:00, 13:00 – 16:30)
Este castillo debe ser un imprescindible en tu ruta por esta zona de Francia. Se trata, sin duda, de uno de los castillos más imponentes que hemos visto, desde su localización hasta su tamaño.
Conviene madrugar o al menos no llegar muy tarde, ya que cuanto más tarde llegues, más lejos del castillo aparcarás, y lógicamente el camino pica para arriba. No hay problema en dejar el coche en los arcenes de la carretera que conduce al mismo:
La historia del castillo se remonta al S. XII cuando el duque de Suabia, Federico de Hohenstaufen, decidió que el Monte Stophanberg sería una buena situación para edificar una fortaleza desde la que controlar sus dominios. A lo largo del tiempo, el castillo fue cambiando de manos, reformándose y ampliándose, hasta convertirse en uno de los más grandes (1,5 hectáreas) y bellos de toda Europa:
Los suecos lo dejaron en ruinas durante la guerra de los Treinta Años, y después quedó abandonado. En 1899, el emperador Guillermo II emprendió la tarea de reconstruir por completo el castillo con el objetivo de convertirlo en museo. Aunque de construcción reciente, el castillo respeta fielmente la arquitectura medieval. Este punto de la reconstrucción quizás le reste algo de encanto para algunos:
A nivel logístico, comentaros que si viajáis con carrito de bebé, éste se puede dejar en un cuarto que tienen destinado para ello.
Antes de conocer sus dependencias, se pasa por la puerta de entrada, ornamentada con el escudo de armas de los Tiersten, sus propietarios durante el siglo XV:
Las dependencias se distribuyen a lo largo de varias plantas. En primer lugar, las estancias que dan al patio de la planta baja, como las cocinas o las bodegas, así como el pozo que abastecía de agua el castillo.
Una ornamentada escalera de caracol nos permite subir directamente al segundo piso donde se encuentran las principales salas del castillo:
Entre estas salas destaca, la ricamente decorada Sala del Kaiser, con vitrales blasonados, maderas nobles y pinturas al fresco:
También se puede apreciar, desde una tribuna, la pequeña Capilla:
El mobiliario que encontramos en estas dependencias no es el original pero permite recrear y acercarnos cómo era la vida en el castillo en aquella época:
Después, se baja al primer piso para seguir con la visita. Aquí destacan dos salas: la Sala de Trofeos de Caza, que nos indica la debilidad de los habitantes del castillo por las actividades cinegéticas, y la típica Sala de Armas, que todo buen castillo debe tener con: armaduras, lanzas, ballestas ,..:
Posteriormente, se pasa por un segundo puente levadizo, que da acceso al jardín y algunas salas que muestran cómo fue la reconstrucción del castillo:
Una vez atravesado el pequeño jardín,se llega al Gran Bastión, un edificio defensivo medieval. Actualmente, existe una pequeña colección de cañones de diversas épocas y modelos:
Es en esta zona, donde se contempla una de las instantáneas más bonitas, con la torre y recinto defensivo, con unas muy buenas vistas de los alrededores:
La misión principal del castillo era vigilar las rutas del vino y del trigo en el norte, así como la de la plata y la de la sal de oeste a este, y como podéis ver las vistas son bastante despejadas:
Castillo de Haut Koenisbourg – Obernai (37 KM, 35′)
Obernai
Dejamos el coche en el Parking Remparts (Rue de l’Abbé Oesterle), es gratuito, bastante grande y está justo al lado de la puerta de entrada a este bonito pueblo amurallado. ¿Qué más se puede pedir?.
Seguramente si el pueblo estuviera en otro lugar destacaría más y sería el pueblo más bonito de la zona, pero es que en Alsacia, todos los pueblos son de cuento, donde el nivel está muy alto, así que éste pueblo fue seguramente el que menos nos sorprendió de la ruta por Alsacia.
Murallas
Aunque no se conserva todo el perímetro de las murallas que había en época medieval (con hasta 4 puertas de entrada, 20 torreones y 1400 metros de longitud), con los restos que se conservan sí que te puedes hacer una idea bastante aproximada de la fortificación:
Sinagoga (11 Rue de Sélestat)
Nada más cruzar la puerta de entrada desde el parking, te topas con esta sinagoga, construida en 1876 en estilo neorrománico. El edificio fue financiado con las contribuciones de la comunidad judía de la época que contaba con 205 miembros. El nuevo edificio reemplazaba a la anterior sinagoga de 1752 ubicada en el número 43 de la Rue Gouraud. La comunidad judía se instaló en Obernai en 1215:
Es bonita la vista desde la parte posterior, con los torreones del recinto amurallado:
Plaza del Trigo
En uno de los extremos de esta plaza, se encuentra la Antigua Carnicería, edificio de estilo renacentista con algunas referencias góticas, construida en 1554. La fachada tiene una terminación en aguilón adornada con dos cabezas de bovinos, también está decorada con los escudos de la localidad:
Patio Fastinger
Situada frente a la Plaza del Mercado, existe una casa con un curioso patio interior, conocido como Patio Fastinger (nombre de los actuales propietarios). En el siglo XV perteneció a un carnicero que mandó construir sobre el pozo, la talla de un toro que aún se conserva:
Plaza del Mercado (Place du Marché)
Fuente de Santa Odile
En el centro de la Plaza del Mercado se encuentra la fuente de Santa Odile, es un homenaje de la ciudad a una de sus figuras más importantes de la historia e ilustre patrona de Alsacia. Fue construida en 1904, siguiendo el proyecto de Alfred Marsolff, mandada inaugurar para celebrar la finalización de las obras de la llegada de agua corriente a la ciudad:
Ayuntamiento
Se conservan vestigios del antiguo edificio sobre soportales, llamado Lambe, edificio público donde albergaba en 1370 la reunión de notables o tribunal de los burgueses y el salón de la justicia.
Campanario (Belfry)
El Beffroi o Kapellturm, cumple una triple función: torre de la ciudad, atalaya defensiva y campanario de la capilla de la Virgen. Es una torre que marca la visión de toda la ciudad con una altura de 60 metros:
Casa romanesca
Construida alrededor de 1240, fue propiedad de la familia Rathsamhausen. Sufrió alteraciones durante el Renacimiento:
Casa de los Vendimiadores (Zum Schnogaloch)
Se encuentra en el número 7 de la Plaza de la Estrella. En esta plaza, otrora repleta de molinos, se machacaba el vino por parte de los viticultores. Era llamada Sinnplatz por la prosperidad de los artesanos dedicados al vino. Nos pareció preciosa por su aspecto peculiar y color morado:
Iglesia de San Pedro y San Pablo
Está ubicada extramuros. Es de estilo neogótico y en su interior guarda un órgano de finales del S. XIX y unas bonitas vidrieras:
Pozo de los 6 cubos
Construido en 1579, es de estilo renacentista y está formado por tres columnas en estilo corintio:
Obernai – Estrasburgo (29 KM, 30′)
En una media hora, llegamos a Estrasburgo, al Hotel Ibis Styles Strasbourg Avenue du Rhin, un hotel funcional, situado en las afueras, pero bien comunicado con el centro a través del tranvía. No teníamos parking, pero no tuvimos problema en aparcar en la calle aledaña.
Para acercarnos al centro, tomamos el Tranvía D: Aristide Briand – Langstross/Grand Rue (Sentido Poteries, 6 paradas, 12’, cada 7’).
Esta parada se encuentra bastante cerca de una de las plazas principales de la ciudad, la Plaza Kleber:
Aubette
En este edificio construido a finales del S. XVIII, se instaló en 1928 un complejo de ocio vanguardista, que comprendía un cine-sala de baile, un salón de actos y un saloncillo-bar.
Desde 2006, tras una campaña de restauración dirigida por el Ayuntamiento , las salas de la Aubette, catalogadas como monumentos históricos, vuelven a estar abiertas al público, ofreciendo regularmente una programación de arte contemporáneo (danza, performances, obras multimedia, etc.):
Plaza Benjamin Zix
Se trata de la plaza principal, de la zona denominada Petit France, la cual es con diferencia, la zona más bonita de la ciudad. Se trata de una muy agradable plaza donde tomar algo en sus numerosos restaurante y cafés. El detalle de las bicicletas sobre los canales, te recordará irremisiblemente a Amsterdam:
Petit France
Declarado Patrimonio de la Humanidad en 1988, todo el barrio está salpicado de románticas casas con entramado de madera de los siglos XVI y XVII, en colores blanco y negro, al típico estilo renano, antaño residencia de los gremios de Estrasburgo y hoy reconvertidos en hoteles con encanto y restaurantes donde degustar la rica gastronomía alsaciana:
Ponts Couverts (Puentes cubiertos)
Se encuentran en la prolongación del barrio de la Petite France. A pesar de la desaparición de los tejados en el s. XVIII, su nombre ha prevalecido. Están dominados por cuatro torres del s. XIV, vestigios de las antiguas murallas. Inmediatamente después de la incorporación de Estrasburgo a Francia en 1681, Vauban construyó un nuevo cinturón de fortificaciones:
Esta zona es preciosa, y conviene recrearse en los detalles que ofrecen algunas casas:
Place du Marché aux Cochons-de-Lait
De vuelta a la zona más céntrica, acabamos cenando en la terraza de un restaurante colindante a esta plaza, llamado Au Vieux Strasbourg, de comida típica alsaciana:
Place du Marché aux Cochons-de-Lait, Estrasburgo, Francia
Plaza de la Catedral
En esta primera toma de contacto de la ciudad, nos resultó imposible no acercarnos hasta la maravillosa Catedral de Notre Dame, la cual visitaríamos al día siguiente:
Catedral de Notre Dame (09:00 – 11:20, 12:45 – 19:30)
La primera vez que la ves te quedas impactado por su tamaño y su belleza. Como carta de presentación fue el edificio más alto del mundo desde 1647 hasta 1874 , y también destacan su gran rosetón, así como un increíble reloj astronómico, que se puede contemplar en el interior:
Para volver al hotel, deshicimos el camino de la ida, tomando el Tranvía D: Langstross / Grand Rue – Aristide Briand (Sentido Kehl Rathaus, 6 paradas, 12’, cada 7’)
