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DIA 13: JUEVES 27 JUNIO 2019: LJUBLJANA – LAGO BLED – LAGO BOHINJ – GARGANTA VINTGAR (PN TRIGLAV) – LJUBLJANA
Partiendo de Ljubljana, visitamos tres de los lugares naturales más bonitos de Eslovenia: los famosos Lagos Bled y Bohinj, y la Garganta de Vintgar en el Triglav NP.
Ljubljana – Lago Bled (72 KM, 53′)
A menos de una hora desde Ljubljana, se encuentra el Laglo Bled, el que seguramente sea el lugar más famoso del país.
Bled
Lo primero que visitamos fue el castillo. Dejamos el coche en el pequeño parking que se encuentra a sus pies (3€ por 2h).
Castillo de Bled (Blejski grad)
Horario: 08:00 – 18:00 (Nov-Mar), 08:00 – 20:00 (Abr, May, Jun, Sept) 08:00 – 21:00 (Jul y Ago). Precio: 11€
Es una de las edificaciones más impresionantes de Eslovenia, más que nada por su fabulosa ubicación, en un acantilado de 125 metros de altura sobre el lago Bled:
La primera referencia histórica es del año 1011, cuando se lo mencionó en un documento de traspaso de tierras. En 1278, el castillo pasó a formar parte del patrimonio de los Habsburgo.
Su torre románica, es la parte más antigua que se ha conservado de la construcción original, a la que se han ido agregando varias torres durante el transcurso de la Edad Media y épocas posteriores:
Habíamos leído que el interior del castillo no merecía mucho la pena y que lo mejor eran las vistas. Buscando información, encontramos un blog donde explicaban como tener unas vistas parecidas a las del castillo, pero sin tener que pagar la entrada del mismo. Ahí explican perfectamente como llegar. Nosotros nos dimos de bruces con una pequeña valla que parecía prohibir el paso, pero al ver que la gente se la saltaba, hicimos lo mismo (uno se quedaba con la niña y el otro saltaba la valla y subía unas pocas escaleras hasta llegar al mirador improvisado).
El resultado fueron unas vistas preciosas del Lago Bled con la iglesia en la isla del medio del lago:
De vuelta al parking del castillo, volvimos a coger el coche y aparcamos en el pueblo de Bled. Concretamente, en el Lake Bled Parking (Prešernova cesta 23, 1’8€/h, 7€/dia). Ojo, si te pasas aunque sea 5′, pagas una hora extra completa más. Tenía pinta que aparcar el coche gratis en el pueblo era misión imposible, poco espacio para aparcar y todo lleno de parkings.
Fijaker
Una vez aparcados, yendo hacia el lago, por la zona del Ayuntamiento (Cesta Svodobe, 13), vimos un transporte típico, llamado fijaker, que no es más que un carruaje a caballos. Los conductores visten el traje de la región, se trata de una profesión que se traspasa de generación en generación. En la asociación de Fijaker (www.fijaker-bled.si) puedes ver recorridos y tarifas. Hay una parada, para quién le interese dar una vuelta, en Cesta Svobode, 9:
Iglesia de San Martin (Riklijeva cesta 19)
Se encuentra en el centro de la ciudad, a orillas del lago. Es un precioso edificio neogótico construido en el año 1905 sobre los restos de otro templo cuyo origen se remontaba al año 1.000. Destaca su tejado ricamente decorado y su interior, con una cúpula dorada que cae sobre el altar:
Lago de Bled
Es un lago glaciar de los Alpes Julianos, que se ha convertido en la postal preferida de los viajeros que visitan Eslovenia. Es muy bonito, pero a la vez muy turístico. Su longitud es de 2120 m y su anchura de 1380 m:
Existe un camino señalizado a lo largo de seis kilómetros que bordea las aguas cristalinas. Puede recorrerse a pie o en bicicleta y cuenta con zonas de descanso desde donde admirar el paisaje. Está permitido bañarse en sus aguas, en las zonas habilitadas:
Heart of Bled
Desde este icónico punto, que verás fácilmente al pasear por el lago, se obtienen unas preciosas vistas encuadras del castillo, isla e iglesia:
Pletna (góndola)
Precio: 15€/p, Muelles: Casino Bled, Spa Park, entre otros.
Se tratan de unas bonitas embarcaciones tradicionales que permiten dar paseos por el lago y visitar la isla con la iglesia. Hay que esperar a que se llenen, lo cual no lleva mucho tiempo por lo que vimos, ya que están bastante demandadas. A nosotros nos pareció bastante caro y no lo hicimos, preferimos pasear tranquilamente por la orilla del lago:
Isla de Bled (Blejski Otok)
Se trata de la única isla natural de toda Eslovenia. Se encuentra localizada en medio del lago. Aquí se ubica la Iglesia de Peregrinación de la Asunción de María.
Iglesia de Peregrinación de la Asunción de María
Precio: 6€
La construcción original data de 1142, cuando era una basílica románica. El templo gótico construido sobre la basílica es de 1465, dotando a la iglesia de un campanario de 52 m, pero fue destruido por un seísmo en 1509. Actualmente, la iglesia barroca data del S. XVII y para llegar a ella hay que subir una monumental escalinata de 99 escalones. Es accesible únicamente vía acuática, bien con las pletna o alquilando un bote de remos (unos 12/15 € por 1h, según temporada):
Otra buena idea es probar uno de los postres estrella de la gastronomía de esta zona: la Kremna Rezina (tarta de vainilla, crema pastelera, hojaldre y azúcar glaseado), que podrás probar en cualquier terraza, cafetería o restaurante que encuentres en el lago.
Si dispones de más tiempo o eres de espíritu más aventurero, puedes subir a dos miradores sobre el lago Bled, donde dicen que hay las mejores vistas del lago: Ojstrica y Osojnica. Tendrás que dar una buena caminata para llegar hasta ellos.
Lake Bled Parking – Lago Bohinj (28 KM, 30′)
Dejamos el Lago Bled, para llegar al que para nosotros fue unas de las visitas más bonitas en este país, el maravilloso Lago Bohinj. Tan sólo distan 30′ en coche entre ambos.
Lago Bohinj
El lago Bohinj es el más grande de toda Eslovenia. Se localiza en el corazón del Parque Nacional del Triglav, a los pies de los Alpes Julianos:
Bohinj se divide en dos valles: el superior y el inferior, contando con un total de 24 aldeas entre ambos. El mayor de los arroyos que desembocan en el lago, el río Savica («pequeño Sava»), se alimenta del Črno jezero (Lago Negro), el lago más grande de los lagos del valle del Triglav.
El lago Bohinj se encuentra a 526 metros sobre el nivel del mar, y una longitud de algo más de 4 km:
En verdad, las fotos no hacen ni una pizca de justicia de la espectacularidad del paisaje. Teníamos pensado simplemente pegarnos un baño después de visitar Bled, y acabamos quedándonos varias horas, disfrutando del baño y comiendo en un restaurante con unas vistas preciosas: Restavracija Kramar:
El coche lo dejamos en este parking: Stara Fužina 3, Bohinjsko jezero (1’5€/h). Se encuentra al lado del restaurante, y de la zona de baño que tiene bastante fácil acceso al agua:
El agua está un pelín fría, pero bastante soportable. Proviene de las aguas de un glaciar, por lo que es un lago natural. Para ser comienzo delverano, no había demasiada gente por la zona, se estaba muy tranquilo:
Iglesia de San Juan Bautista (Ribcev Laz 56)
Muy cerca de donde dejamos el coche, se encuentra esta iglesia, construida en el S. XIII, conserva algunos frescos en su interior. El bonito campanario barroco fue añadido posteriormente, en el S. XVIII:
Esta zona es una delicia para pasear, practicar senderismo o deportes acuáticos. Todo verde, con las montañas al fondo, y paisajes salpicados por bonitas iglesias de ocres campanarios bulbosos. Unos paisajes bucólicos:
Esta zona les encantará a los amantes de la naturaleza. También son populares en los alrededores, la visita al teleférico de Vogel y a la cascada Savica.
Parking Bohinj Lake – Vintgar Gorge (34 KM, 42′)
Despidiendo con pena esta preciosa zona de Eslovenia, nos dirigimos a la Garganta de Vintgar, a la que llegamos a su parking (Turisticno drustvo Gorje, Podhom 80, 4247 Zgornje Gorje) en menos de 45′.
Vintgar Gorge
Horario: 08:00 – 19:00, Precio: 9€ adultos, 1€ bebes (3’2 KM, 1h 30′ paseo)
Nos sorprendió bastante que cobraran por entrar a un bebé, la verdad.
Vintgar Gorge (o Blejski Vintgar) forma parte del Triglav NP. El Triglav es la montaña más alta de Eslovenia (2.864 m.)
Las paredes de este desfiladero, excavado por el río Radovna, llegan a los 100 metros de altura y separan los montes Boršt y Hom:
Fue descubierta por Jakob Žumer en 1861 y desde 1893 está abierta al pbúlico que, a través de pasarelas de madera ancladas a las paredes de las montañas o suspendidas entre un lado y otro del río permiten dar un agradable paseo entre la naturaleza, siguiendo el curso del río:
Nosotros hicimos el camino con mochila portabebé y había algunas zonas donde sí que encontramos bastantes visitantes, es una visita muy popular:
Hacia el final del sendero, hay una zona de presas y la cascada Šum:
Llegados a este punto, decidimos volver, aunque se podía seguir todavía algo más. En total, con parada para merendar la niña incluida debimos tardar algo más de una hora y media en llegar hasta la zona de las presas y regresar al parking. Si viajas más ligero, seguramente lo hagas en menos tiempo:
Se trata de un lugar muy bonito y recomendable de visitar, pero quizás teníamos las expectativas muy altas y no nos acabó de parecer tan espectacular como pensabamos:
Para los amantes de la fotografía, el lugar ofrece muchas posibilidades con el desfiladero, el transcurrir del río y los saltos con el agua espumosa:
Vintgar Gorge – Ljubljana (65 KM, 52′)
Con esto, dimos por finalizadas las visitas del día. Lo bueno de Eslovenia es que es un país pequeño, por lo que en menos de una hora estabamos de nuevo en Ljubljana, nuestra base de operaciones. Por fin, mañana conoceríamos la bonita y coqueta capital del país.
