Después de pasar la noche en La Spezia, este día lo dedicamos a visitar las Cinque Terre, compuesta por 5 bonitos pueblos: Riomaggiore, Manarola, Corniglia, Vernazza y Monterosso al Mare.
Índice
DIA 4: MARTES 3 MAYO 2022: LA SPEZIA – CINQUE TERRE – LA SPEZIA
Para visitar estos pueblos, la mejor idea es hacerlo en tren. Aunque tengas coche de alquiler, no es muy buena idea, pues son pueblos muy pequeños, con muy poco espacio para aparcar (muchos sitios son sólo para residentes y en muchos otros sitios donde podrías dejar el coche hay señales de prohibido aparcar). También es posible visitarlos en tours en barco.
Asismismo, hay numerosas rutas de senderismo, que permiten conectar un pueblo con otro, pero no era el objetivo de nuestro viaje.
Existe una tarjeta (5 Terre Card) que permite montarte en el tren tantas veces como quieras en el día. La frecuencia de trenes a lo largo del todo el día es muy buena y las distancias entre los pueblos es muy pequeña:
La Spezia- Riomaggiore(9’)- Manarola(3’)- Corniglia(3’)- Vernazza(4’)- Monterosso(4’)
Ésto te permite que si aprovechas bien el día, puedas visitar los 5 pueblos en una única jornada. Nosotros planteamos la visita, yendo primero al pueblo más alejado de La Spezia (Monterosso al Mare) y volviendo poco a poco a La Spezia, visitando en último lugar Riomaggiore.
EL principal incoveniente de la visita a Cinque Terre, es que encontrarás seguramente mucha gente, ya que es una zona muy turística, tanto en la visita a los pueblos como en el propio tren.
Monterosso al Mare
Es el más concurrido de los cinco pueblos de Cinque Terre, siendo en realidad un pequeño pueblo, dividido en dos: el casco antiguo, construido durante el S. XIII detrás del puerto, y la parte moderna, que puede albergar a un gran número de turistas, en modernos hoteles.
El pueblo fue diseñado como la fortificación más importante de Cinque Terre, especialmente contra las invasiones piratas.
Si bien no es tan atractivo de manera rural como los otros pueblos, es el que goza de la playa más atractiva y de la mayor oferta de ocio nocturno.
Fegina Beach
Es la playa más larga (y además de arena), pero también la mejor dotada en cuanto a equipamientos básicos. Hay una parte con tumbonas y sombrillas de pago, pero también hay partes donde dejar tu propia toalla.
Como inconveniente, es una de las más concurridas de Cinque Terre:

Hay una parte especialmente bonita, aunque en la época de nuestra visita (Mayo) no estaba el agua como para bañarse. Esta roca se conoce como el Scoglio de Monterosso:

Al final de la playa (hacia el lado contrario al pueblo), se encuentra la Estatua Il Gigante, conocida como la Estatua de Neptuno. Diseñada por Arrigo Minerbi (escultor) y Francesco Levancher (arquitecto), la estatua es un coloso de hormigón y hierro, de 14 m. de altura y 170 toneladas de peso:

Torre Aurora
Fue construida por los genoveses durante el S. XVI como parte del sistema defensivo local contra los ataques piratas. Se encuentra en pleno centro de la población, delimitando el límite entre el casco antiguo y la moderna Fegina:

Tras pasar la Torre Aurora, un conjunto de escaleras llevan en descenso hasta el casco antiguo de la ciudad. Si lo deseas, otro conjunto de escaleras a mano izquierda, permiten subir hasta el Monasterio de los Capuchinos, del S. XVII.
Monterosso Beach (Old Town)
Una pequeña playa con una bonita panorámica, con el azul limpio del mar y las montañas verdes detrás:

Torre del Reloj
Antiguamente, era una torre de vigilancia. En la actualidad es la torre del reloj de la Iglesia de San Giovanni (San Juan):

Iglesia de San Juan Bautista
De estilo gótico, fue construida entre los S. XIII y XIV. Está ubicada en la parte antigua del pueblo, no muy lejos del mar:

Oratorio Mortis et Orationis – Confraternita dei Neri
Al lado de la iglesia de San Juan Bautista, se encuentra este oratorio cuyo nombre significa “de la Muerte y de la Oración”. Es de estilo barroco:

Casco Antiguo
El pequeño casco antiguo, tiene en los alrededores de la torre del reloj, algunas callecitas con casas de bonitos colores pastel:


Vernazza
Este pequeño pueblo, es uno de los más visitados de Cinque Terre, y para mi gusto, uno de los más bonitos.
Destacan un pequeño puerto natural, la Iglesia de Santa Margherita di Antiochia (construida en el S. XIV), así como el sistema de defensa: un muro, dos torres de vigilancia y el Castillo de Doria:

Iglesia de Santa Margarita de Antioquia y Campanario
Su estructura original data del S. XI, mientras que otras partes del edificio están documentadas para el año 1318, bajo el dominio genovés:

La iglesia está dominada por una bonita torre, y su fachada está flanqueada por tres columnas adornadas con ventanas con parteluces:

En cuanto al interior, destacan un crucifijo de madera (de Anton Maria Maragliano), una estatua de madera del S. XVIII y un altar barroco (1750).
Puerto
Es la parte más bonita del pueblo, con bonitas vistas a la iglesia y a la plaza principal:

Además, se forma una pequeñísima playa de arena, bañada por aguas tranquilas y poco profundas, en gran parte debido a que está protegida por el puerto que crea una especie de refugio natural contra las posibles turbulencias del mar:

La calles principales del pueblo (Via Visconti y Via Roma) están llenas de restaurantes con comida para llevar (foccacias, calamari, fish&chips, …). Así que nos pareció buena idea llevarnos nuestra comida y hacerlo en esta playita, dado el buen día que hacía.
Torreón de los Doria
Las primeras referencias históricas a esta edificación datan del S. XIII, aunque en el S. XX sufrió importantes obras de restauración. Es muy probable que se construyera como parte del sistema de fortificaciones encargado por los genoveses durante la Alta Edad Media.
Está erigido sobre un escarpado peñasco, y dada su ubicación, tiene una forma bastante irregular, coronado por una torre, conocida como Belforte:

Mirador
Una de las postales más bonitas de Vernazza, se obtienen desde el mar, y si esto no es posible, también tendrás una vista fabulosa desde este mirador. Antes de llegar a él, hay un control de acceso.
Si presentas tu Cinque Terre Card del tren, te permiten pasar. Basta con andar unos pocos metros por un camino muy estrecho (hay barandilla y no hay peligro) y obtener una de las mejores fotos de tu visita a Cinque Terre:

Corniglia
Se trata del pueblo más tranquilo de Cinque Terre. La razón es que no tiene salida al mar, al encontrarse en lo alto, y además el acceso no es apropiado para viajeros perezosos.
Hay que subir bien en autobús (gratuito con el billete de tren de la Cinque Terre Card) o bien a través de la llamada Escalera Lardarina, que consta de 382 escalones a lo largo de 33 rampas. Nosotros, al viajar con dos niños pequeños nos decantamos por la opción del autobús, el cual está continuamente subiendo y bajando, así que no nos tocó esperar mucho.
Corniglia es en realidad un apodo del colono romano Corneliu, quien presumiblemente fundó este asentamiento. Corniglia era bien conocida por su producción de vino desde la antigüedad: en las ruinas de Pompeya se descubrió un ánfora de vino, con la palabra “Corenelia” escrita en ella.
Se encuentra situado en un promontorio de más de 100 metros de altura, rodeado de viñedos y olivares:

Iglesia de San Pedro
Construida en 1334, sobre un edificio anterior del S. XI. Tiene una mezcla de estilos barroco, gótico y con algunos típicos elementos lígures. La fachada está adornada con un rosetón (1351) en mármol blanco de Carrara. En el interior hay una fuente bautismal del S. XII:

Iglesia de Santa Caterina
El Oratorio de los Disciplinados de Santa Catalina (S. XVIII) está situado en el corazón del pueblo, en la pequeña plaza Largo Taragio:

Subiendo por unas escaleras que se abren en la parte posterior del oratorio, se accede a una terraza panorámica:
Terraza Panorámica de Santa María
Desde aquí se aprecian unas fantásticas vistas de la costa de Cinque Terre:


Como alternativa, se puede echar un café en la terraza del Ristorante La Posada, con otras bonitas vistas de esta costa. Se encuentra ubicado justo donde acaba la escalera Lardarina:

Manarola
Es el más antiguo y el mayor productor de vino de los cinco pueblos de Cinque Terre. El primer año en que se menciona en un documento histórico es 1273, cuando, bajo el dominio genovés, el pueblo comienza a progresar, convirtiéndose en uno de los mejores proveedores de aceitunas y vinos de la región:
El pueblo está construido sobre una roca de 70 m de altura con casas de colores con vistas al mar, y ofrece una de las estampas más fotogénicas de todos estos pueblos, con las casas colgadas sobre el mar:

Tan sólo hay que tomar la calle principal (Via Belvedere) hasta llegar a una zona donde hay diversos miradores:



En el pueblo también se puede visitar la Iglesia de San Lorenzo y su torre campanario, así como el Oratorio de los Disciplinados, que se encuentra justo enfrente.
Riomaggiore
Es considerado uno de los pueblos más románticos (y grandes) de Cinque Terre. Una miríada de casas coloridas en estilo típico de Liguria y un puerto tallado en las rocas.
Su calle principal (Vía Colombo) está llena de comercios y restaurantes, y conecta la zona del malecón con la parte más alta del pueblo. En la parte izquierda encontrarás unas escaleras que dan acceso a la Iglesia de San Juan Bautista y al Castillo (Castellazzo di Cerricó):

Iglesia de San Juan Bautista
Es una de las iglesias más importantes de la zona. Fue construida en 1340 por orden de Antonio Fieschi.
La fachada con visibles influencias góticas es parte de los resultados de las obras de restauración realizadas en el S. XIX, junto con la cubierta de la iglesia.
El interior está estructurado en tres naves, donde destacan: un púlpito de 1530 decorado con un bajorrelieve que representa a San Martín, un crucifijo de madera de Maragliano y a una obra que representa a un Juan Bautista predicando supuestamente creada por Domenico Fiasella:

Castillo
Construido en el S.XIII por orden del Marqués Turcotti, es uno de los edificios históricos más importantes de Cinque Terre:

De base cuadrada, está rematado por dos torres circulares que flanquean la entrada. Con el tiempo, el castillo sufrió importantes modificaciones estructurales, sin mencionar que también y además se usó como cementerio (a principios del S. XIX). En la actualidad, el edificio se utiliza con fines culturales, siendo sede de diversos eventos:

Ubicado justo al lado del castillo, se encuentra el Oratorio de San Rocco, que fue construido en 1480 después de una plaga. Dentro hay un tríptico que representa a la Virgen con el Niño y los Santos.
Además, como el castillo está ubicado en la zona más alta del pueblo, hay bonitas vistas panorámicas, tanto del mar, como de las coloridas casas desperdigadas por la montaña:


Con la visita de este último pueblo, cogimos el tren por última vez hasta La Spezia. Al día siguiente abandonaríamos esta ciudad, para retomar de nuevo nuestra ruta por la Toscana.