ESTONIA – RELATO DE VIAJE: PARTE II/II
DIA 3: JUEVES 17 JULIO 2014: TALLIN – HELSINKI – TALLIN
Este día realizamos una visita a Helsinki desde Tallin. Aunque Helsinki no es la ciudad europea más atractiva, sí que da para pasar un día agradable, y si dispones de tiempo, no está de más incluirla en tu itinerario.
Partimos en el ferry 
de las 10:30 desde la Terminal D del puerto de Tallin. Tened en cuenta que hay que estar un poco antes para realizar el embarque. Viendo el tamaño de los ferries y de algunos cruceros, se deduce fácilmente que la ciudad es muy visitada. Recomendamos hacer alguna noche en Tallin, porque según va entrando la tarde, muchos turistas abandonan la ciudad y se está mucho más tranquilo.
Las vistas de la ciudad desde el ferry es bastante chula, destacando el pináculo de la Iglesia de San Olaf, por encima del resto:
En Helsinki tomamos el ferry de las 19:30, llegando a las 21:30, de vuelta a Tallin. Puedes ver aquí nuestro diario de Helsinki.
Tras pasar por el hotel, salimos a cenar y a visitar el barrio de Rotermann Quarter.
Si visitas el país en verano, las horas de luz están de tu parte. Los días cunden muchísimo, y aunque parezca en las fotos que esté atardeciendo, eran fácilmente las 23:00 de la noche.
Este barrio nada tiene que ver con la imagen medieval de Tallin que todo el mundo tiene. Si te gusta la arquitectura, merece la pena echar un ojo a este moderno barrio, donde se han rehabilitado viejas fábricas y almacenes para dar vida a galerías y centros artísticos. Se encuentra muy cerquita del casco antiguo, así que si te sobra tiempo en la ciudad, es una idea para dar un paseo agradable:
Tras cenar por la zona, nos dirigimos al hotel. En el camino pasamos por delante del Teatro Drama (Pärnu maantee, 5), el más antiguo de Estonia (1910):
DIA 4: VIERNES 18 JULIO 2014: TALLIN – MADRID
Después de dos semanas recorriendo Rusia, Estonia y Finlandia, hoy se acababa el viaje. Teníamos aún toda la mañana para rematar alguna cosilla en Tallin, así que nos pusimos manos a la obra.
Fuimos a desayunar a uno de los cafés más famosos de la ciudad, el 
Café Maiasmokk (Pikk, 16). Es el café más antiguo de Estonia. Nos encantan este tipo de sitios. Especialmente los de Europa Central, como los que visitamos en Viena o Budapest.
Mirando qué visitar cerca de Tallin, dimos con el Palacio y los Jardines de Kadriorg. No son muy espectaculares, pero si estás varios días en la ciudad, puede ser una opción a tener en cuenta. Para llegar allí, cogimos el tranvía
1. La parada está justo saliendo por la Viru Gate. Puede que haya cambiado la numeración, porque ahora parece ser que es el 3. Tarda unos 10 minutos, por lo que está muy cerca del centro en realidad.
El palacio se conocía antiguamente como Catherinethal, en honor a Catalina I de Rusia. Fue mandado construir por Pedro I El Grande (1718).
El exterior es barroco y actualmente aloja una galería de arte, aunque nosotros sólo nos dedicamos a pasear por los jardines y verlo por fuera:
Otra de las visitas que se pueden realizar en el parque, si estás interesado en el arte, es el KUMU Art Museum (Valge, 1).
Al tomar el tranvía de vuelta a Tallin, dimos con la calle Koidula, una calle residencial que todavía conserva algunos bonitos edificios de madera:
Tras volver a Tallin, ya sólo nos quedaba despedirnos del centro. Fuimos a visitar un sitio muy recomendable, el 
III Draakon (ubicado en los bajos del Ayuntamiento). Aquí lo típico es comer sopa y empanadillas. Es el típico sitio megabarato, como 1€ la bebida y 2€ la comida (puede que haya subido desde entonces). Nosotros nos tomamos una cerveza antes de seguir paseando por el centro. Se identifica claramente con este simpático cartelón:
Finalmente comimos en un restaurante vegano: Vegan (Rataskaevu, 12). Las falsa hamburguesa estaba riquísima:
Ya no nos quedaba mucho más por hacer, después de comer tomamos el autobús 
2 desde la calle A Laikmaa hasta Lennujaam (Aeropuerto). A las 18:15 salía el vuelo de Brussels Airlines, que nos llevaría a Madrid tras escala en Bruselas.
Esperamos que el diario os haya sido de utilidad. ¡Hasta el próximo viaje!
